Descripción
¿Has oído hablar del Puente Qeswachaka? Conocido como el último puente inca, se ha conservado durante siglos gracias a la dedicación de las comunidades cercanas. Cada año, más de 800 lugareños se reúnen con manojos de hierba pluma peruana (Ichu) para pasar cuatro días restaurando esta increíble pieza de historia. Únete a nosotros en esta excursión de un día completo para presenciar esta maravilla de 600 años de antigüedad, uno de los sitios más notables de Cusco.
El recorrido te lleva al pueblo de Quehue, donde tendrás la oportunidad de cruzar el puente de 30 metros de largo que se balancea sobre el río Apurímac. Si visitas en junio, podrás presenciar la impresionante ceremonia anual, en la que los miembros de la comunidad derriban el puente viejo y construyen uno nuevo. Reconocido como Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO, este espectáculo incluye rituales ancestrales y una vibrante celebración. Además, visitarás las famosas 4 Lagunas, ¡un viaje verdaderamente inmersivo que no te puedes perder!
Lugar de salida y regreso
Traslado al hotel en Cusco
Hora de salida
4:00 AM
El precio incluye
Precio no incluye
Itinerario
Día 1: Cusco - Combapata - Quehue - Puente Qeswachaka
El viaje comienza a las 4:00 a. m. desde Cusco, seguido de un recorrido panorámico de tres horas hasta la remota provincia de Canas. Haremos una parada a mitad de camino para desayunar y luego continuaremos pasando por el pueblo de Yanaoca hasta llegar a Quehue (3792 m / 12 441 pies). Desde este encantador pueblo, un corto recorrido nos llevará al puente Qeswachaka.
En este impresionante lugar, tendrá la oportunidad de cruzar el puente y experimentar un pedazo de historia viva. Qeswachaka combina las palabras quechuas “Qeswa”, que significa “trenza”, y “Chaka”, que significa “puente”. Este puente de 30 metros de largo está tejido a mano con pasto pluma peruano, o ichu. Cada año, cuatro comunidades de los alrededores se unen para desmantelar el viejo puente y construir uno nuevo utilizando métodos tradicionales, herramientas básicas y una fuerza notable, continuando una tradición que ha perdurado durante siglos.
Suspendido a más de 15 metros sobre el río Apurímac, sentirás la emoción de cruzar de un lado al otro mientras admiras las impresionantes vistas del cañón. ¡No olvides capturar el momento con tu cámara! Si estás de visita en junio, podrás presenciar la ceremonia anual de reconstrucción, con rituales dedicados a la Madre Tierra y danzas folclóricas regionales.
Después, disfruta de un almuerzo para llevar cerca del puente y admira las últimas vistas de este lugar único. En el viaje de regreso, conduciremos por la ruta de las 4 lagunas, deteniéndonos para ver las hermosas lagunas de Pomacanchi, Ancascocha, Pampamarca y Acopia, a menudo llamadas las "lagunas sagradas", que proporcionan pescado a las comunidades locales. Finalmente, relájate en el viaje de regreso a Cusco, con recuerdos de un día inolvidable en los Andes peruanos.